Después de 20 años y cinco meses de servicio ininterrumpido en el Colegio Nueva Colombia IED, el profesor Héctor Rodríguez cierra con gratitud su ciclo como educador de la Secretaría de Educación. Sus colegas y amigos le dedican estas palabras, que son abrazo, memoria y agradecimiento profundo.
Durante más de dos décadas, el profe Héctor fue parte del alma del colegio. Su presencia tranquila, su voz siempre dispuesta al diálogo, su mirada respetuosa y su pasión por enseñar lo convirtieron en uno de esos educadores que no solo se recuerdan: se admiran.
En medio de reuniones, retos curriculares, recreos con café y muchas risas compartidas, construyó con nosotros más que un espacio laboral: construyó comunidad. Por eso su despedida no es una ausencia, sino una semilla que deja frutos duraderos.
Hoy, sus compañeros y compañeras del Colegio Nueva Colombia le decimos: gracias. Gracias por tu entrega, por tu lealtad silenciosa, por tu forma respetuosa y generosa de habitar este oficio. Te extrañaremos mucho, sí, pero también te celebramos.
Sabemos que el nuevo ciclo que comienzas estará lleno de la misma pasión que pusiste en el aula. Porque los verdaderos maestros no se retiran: simplemente cambian de trinchera.
Buen viento y buena vida, querido profe Héctor. Esta siempre será tu casa.
Con cariño tus compañeros